mediación vecinal
soluciones en tu comunidad
La mediación vecinal se refiere a la resolución de conflictos existentes entre las partes integrantes de una Comunidad de Vecinos o bien aquellos que afecten a la propia Comunidad en su conjunto y representada por su Administrador.
El conflicto forma parte de nuestra vida y en sí mismo no es negativo. Lo que es muy perjudicial es la forma en que lo afrontamos y si ésta es a través de acudir a los tribunales, la sentencia, lejos de solucionar el problema lo va a aumentar y todos sabemos que muchas sentencias no se cumplen, dando lugar a un círculo vicioso de demandas y recursos que empeoran las relaciones y en el seno de las Comunidades de propietarios suponen una lacra para la buena gestión de la misma y para la necesaria convivencia entre vecinos.

Acudir a un mediador para solucionar los conflictos tiene grandes ventajas en el seno de una Comunidad de Propietarios:
- Evita la culminación en un proceso contencioso con los efectos negativos que ello tendría para las relaciones de convivencia entre los vecinos
- Permite un diálogo entre las partes que es necesario para futuros acuerdos o tomas de decisiones en la Comunidad.
- Los acuerdos tomados a través de mediación se cumplen (no así las sentencias) ya que son las partes afectadas las que han contribuido a dar soluciones teniendo en cuenta sus intereses y dejando de lado el factor emocional que con frecuencia impide llegar a esas soluciones.
- Además de los costes emocionales, la mediación evita los costes económicos que supone acudir al proceso judicial
- El proceso de mediación es rápido y flexible, dando lugar a acuerdos eficaces y buenos para ambas partes, permitiendo la continuidad de las relaciones entre las partes afectadas.
Todo ello es posible por la intervención del mediador, un tercero neutral, formado en técnicas de comunicación que va a hacer posible que las partes se centren en sus intereses y busquen la mejor solución para ambas a través de una comunicación basada en la colaboración y no en la confrontación.
Algunos de los conflictos más frecuentes en los que se aplica la mediación vecinal son:
- Obras en la comunidad o privadas
- Los derivados de la convivencia
- Abandono o desatención de los espacios comunes
- Abandono o desatención del espacio privado de otro (malos olores, ruidos, roturas…)
- Uso indebido del espacio comunitario
- Desconocimiento de la normativa comunitaria
- Situaciones de acoso en comunidades de vecinos
- Contratación de servicios externos
- Falta de estatutos comunitarios y normas de convivencia